ENDRINA
es difícil entenderla
continuar su camino
sin hallar una respuesta.
Endrinos
crecieron sus frutos
la arena
tatuada de sus playas,
para que pensar en detenerla
cambiar su destino
revivir lo pasado.
De flores y espinos
la luz
cobijo sus hojas
recorrió descalza
la desnudez de sus versos
el vaivén de sus huellas.
¿Quién le extenderá los brazos
apartará sus temores y miedos
matará su lado flaco?
Reynaldo Armesto Oliva. Cuba. IWA